Especial bodas: Las últimas tendencias en vestidos de novia

La industria de las bodas está en su mejor momento. Tras ver las propuestas de Barcelona Bridal Week y de otras pasarelas internacionales, empieza la temporada que más nos gusta ¡la de las bodas! Así que en Stylight hemos recopilado las que serán las tendencias en vestidos de novia, para que en tu día especial también vayas a la última.

Esta temporada, sin duda nos ha sorprendido: bordados, vestidos blancos, encajes, colas, velos… ¿quieres ver algo nuevo? Sigue leyendo y echa un vistazo a nuestra selección de vestidos de novia.

Estamos acostumbrados al blanco o como mucho, a los tonos pastel, pero jamás imaginamos a una novia vestida de negro. Ahora toca olvidarse de los prejuicios y atreverse con la tendencia que ha marcado la Barcelona Bridal Week, ¡que el vestido de novia lleve detalles en color negro! Las opciones son infinitas: estampados, tocados, cintas, plumas, hombreras… claro que, los vestidos de novia no son tan convencionales tal y como hemos visto en la pasarela de Isabel Sanchís.

En las pasarelas internacionales también hemos visto el binomio B&W en las colecciones de Vera Wang que ha rematado sus vestidos asimétricos con flores extra grande de color negro; en la de Marchesa o en la de Carolina Herrera, en los que hemos visto cintas negras alrededor de la cintura.

La joyería pasa de ser un accesorio a una parte esencial del vestido, tal y como hemos visto en algunas pasarelas de la Bridal Week de Nueva York. Incluso el diseñador Reem Acra cubrió sus vestidos de pedrería inspirándose en la joyería de Tiffany & Co. Monique Lhuillier cubrió el vestido estrella de la colección de collares de perlas creando un cuerpo con hombreras y una bonita caída.

Las capas nos recuerdan a las prendas de abrigo para los vestidos de princesa, y ahora están más de moda que nunca en vestidos clásicos y en los más modernos. En la pasarela barcelonesa, hemos visto diferentes modelos y hay uno para cada tipo de novia: minimalista con un tocado negro, con cuerpo de pedrería y estrecho o con aires ibicencos.

Algunos de los vestidos presentados en las pasarelas nupciales no se parecen en casi nada, a los vestidos blancos e impolutos de novia. En Barcelona, Isabel Sanchís jugó con los cuerpos plagados de pedrería combinados con partes de abajo lisas. Jesús Peiró, presentó un vestido con caftán bordado de flores aguamarina conjuntado con una diadema de grandes flores.

Tanto en Barcelona, como en el desfile de Naeem Khan en Nueva York, hemos visto que las flores son el mejor accesorio o el estampado más alegre con el que confeccionar los vestidos de novia.

Tendencia que se repite en los vestidos de damas de honor e invitadas a las bodas. ¡La primavera también está en los vestidos de novia!

No es tiempo para velos sencillos y discretos; es el momento para darle al velo todo el protagonismo. Isabel Sanchís vuelve al pasado y rescata un velo estructurado de inspiración Balenciaga ¡Alucinante!

Y en Nueva York, hemos podido ver diferentes tipos de velo, entro los que nos ha llamado la atención, el discreto tocado que cubre la cara de Lela Rose o el de Viktor & Rolf, corto, y después largo y con formas circulares.

No pienses que si el velo es exagerado, debe ir acompañado de un vestido discreto; esta temporada más es más. Lo principal es crear una armonía, una silueta en la que se complementen el vestido y el velo, pero nada de escatimar en estampados, bordados o tamaños.

Hay bodas de muchos tipos y vestidos, o en este caso conjuntos, que se adaptan a cada una de ellas. La cuestión es que la novia irá radiante y fiel a su estilo. Bien sea una boda por lo civil o por la Iglesia, la novia puede decidir casarse con un conjunto de top y pantalón con cola, como el modelo de Cybmeline. O con un mono bordado como el de Naeem Khan.

Los diseñadores experimentan con nuevas dimensiones, más grandes, más volumen, más cuerpo… Y dotan al vestido de novia de ese halo de princesa de cuento ¡Nos encanta! Porque el vestido tiene una presencia propia y una personalidad arrolladora. La idea es cargar la parte inferior para hacerlo XXL, pero hacer que tanto el cuerpo como el tocado o el maquillaje sea lo más discreto posible.

La moda del side bob llega también a los vestidos de novia. Es una idea preciosa porque los vestidos se adaptan al cuerpo como una segunda piel y la novia es como una bailarina de ballet. Eso sí, es para novias atrevidas que se salen de los convencionalismos, ya que quizás en una Iglesia no sea del todo acertado…

Tal y como vemos en los diseños de Pronovias o de Victor&Rolf, la apertura lateral requiere que el cuerpo sea más sencillo que en otros vestidos, aunque se puede jugar con diferentes tiras, con un escote frontal o incluso con tejidos de pedrería; por eso la parte de abajo acepta otras formas y tamaños.