Descubre los 4 pasos para limpiar la piel a fondo

Cuando nos desmaquillamos o nos lavamos la cara antes de acostarnos, intentamos quitarnos esas “impurezas” que, inevitablemente, absorbe nuestro rostro. En un simple vistazo parece que todo está perfecto, pero si miras con lupa, empiezas a ver puntos negros, poros oscuros, brillos aquí y allá… Con lavarnos la cara ¡no basta! es necesario dedicarle más tiempo y productos especializados a la piel. Con estos 4 pasos o métodos infalibles, no habrá poro que se resista.

Paso 1: abrir los poros con vapor de agua
Lo más eficaz es un baño con agua caliente en la que nos fundamos con los vapores de la ducha, o simplemente, lavar la cara con agua muy caliente. De esta manera, el poro se abre y después será más sencillo retirar la suciedad.

Otra manera de hacerlo es calentando agua en una olla y colocando la cara en los primeros vapores ¡cuidado! si el agua hierve, retírala del fuego. Coloca una toalla alrededor, para que el vapor se concentre ahí. Tras 10 minutos, la piel estará lista. Pasa un algodón con agua micelar, una esponja exfoliante con suavidad o solo agua y jabón neutro. Finaliza, aplicando tu crema facial habitual.

Paso 2: exfoliación
La mejor manera de mantener los poros a raya, es pasando cada 2-3 días una esponja exfoliante. Eso sí, hazlo con suavidad, en la zona afectada y con algún limpiador ¡no queremos que te irrites la piel!

Puedes incluso, hacer un exfoliante natural en casa a base de 2 cucharaditas de bicarbonato de sodio y una de agua. Crearás una pasta cremosa que tienes que extender por el rosto en movimientos circulares y dejar actuar durante 5 minutos. Retira el exfoliante con agua fría y ¡listo! repite este paso hasta una vez a la semana.

Paso 3: máscaras
Son a las que más recurrimos en los momentos de relajación, cuando tenemos más tiempo y queremos darnos unos minutos de “spa casero”. Su poder de limpieza y eficacia es enorme y muchas de ellas tienen otros beneficios como rejuvenecer, estirar, eliminar el acné, nutrir la piel… ¡nos encantan!

Te recomendamos que compres la que mejor se adapte a tu piel, pregunta a especialistas para que den con la que de verdad necesitas. No compres cualquiera o la primera que te vendan como el “elixir” de las mascarillas.

Paso 4: bandas
Seguro que también las has usado, o has visto a tu madre con una enorme “telilla” blanca en la cara. Pues esas son las bandas que retiran la suciedad, puntos negros y espinillas en un momento. Su uso es muy sencillo. Se adhieren a la piel cuando están húmedas y se dejan secar y actuar durante unos minutos. Cuando la retiras, puedes ver a trasluz, las espinillas pegadas. ¡Ya verás que alegría te entra al verlo!