4 looks perfectos para llevar un cárdigan

Los cárdigans siempre son la respuesta

Las estaciones del año se nos echan encima y nunca sabes qué ponerte. Para toda esta incertidumbre, un cárdigan siempre es la prenda ideal en cualquier estación, porque nos ofrece un calor acogedor en los días más frescos de invierno y los cárdigans más finos nos cubren suavemente en las noches de verano. Un cárdigan se adapta a diferentes temperaturas, porque puede abrigarnos inmensamente si es de knitwear, o resultar más ligero si optamos por llevarlo desabrochado. Para todas las estaciones del año, elige un cárdigan para ti en Stylight y llénate de estilo cada día.

El cárdigan y el conde

Como sucede con muchas otras prendas, el origen de los cárdigans es también curioso. Deben su nombre a James Thomas Brudenell, que era conde de Cardigan. Durante la Guerra de Crímea, en 1854, el conde pasaba mucho calor, hasta que un día decidió cortar con su propia espada la parte de arriba de su traje militar. Y desde entonces el uso de esta prenda se popularizó entre los soldados, y más tarde, los cárdigans llenarían los armarios a lo largo y ancho del planeta. Los más clásicos, en colores lisos, como los de la colección Vero Moda te servirán todo el año para combinar con camisetas, o blusas.

Polifacéticos

Los cárdigans tienen una increíble versatilidad, puedes llevarlos con unos secillos jeans, con pantalones de vestir, con faldas… y con todo lo que se te ocurra. Por este motivo los cárdigans te serán de gran ayuda tanto si quieres asistir a una cita informal, como si quieres llevarlo a trabajar. Además, hay cárdigans de lana más que cómodos, como los de Michael Kors, que llamarán la atención sin necesidad de que lleves nada más encima. Si quieres un toque más chic, podrás encontrar cárdigans con detalles como lazadas cruzadas, que siempre saben como reconvertir los looks con elegancia y sensatez. No esperes más y échale un ojo a los cárdigans de Stylight, ¡y cogerás más de uno!

4 looks perfectos para llevar un cárdigan

Entallado, con tachuelas o confeccionado en el más fino cachemir: las antiguas chaquetas de punto de la abuela han experimentado una actualización total y con su nuevo nombre han hecho temblar a las alfombras rojas de todo el mundo. Un elegante vestido de noche consigue una preciosa ruptura de estilos si lo combinas con cárdigans en tejidos nobles. Durante el día son una alternativa que sigue haciéndose cada vez más popular ante las chaquetas finas o los clásicos blazers. Stylight te presenta cuatro conjuntos preciosos para ponerte un cárdigan.

1. Cárdigans con piedras brillantes o tachuelas

Estos cárdigans corroboran que las chaquetas de punto no son para nada aburridas. Las tachuelas y los brillantes en las hombreras, el cuello o los botones otorgan un toque espectacular.

Queda bien con: completa el look con una blusa entallada, unos pantalones ajustados, un sombrero discreto de un solo color y con zapatos y cinturón a juego.

2. Cárdigans en tonos pastel

Ya sea en color melocotón, celeste, pistacho o frambuesa los cárdigan en colores pastel delicados se dejan combinar de maravilla con el blanco y dan un look refrescante y muy dulce.

Queda bien con: los cárdigans elegantes y cortos con manga 3/4 son los compañeros ideales de los vestidos de noche blancos. Los modelos largos pueden llevarse con pantalones de traje, blusas blancas y brogues o tacones.

3. Cárdigans oversize

Los cárdigans oversize son la opción perfecta para las personas menudas. Estos modelos no suelen tener botones y la función de cierre la hace un cinturón al talle que cierra la chaqueta durante los días fríos.

Queda bien con: unos jeans pitillo oscuros o los leggings de cuero con camisetas básicas sencillas quedan de maravilla con cárdigans XXL abiertos. Apuesta por unas chuck o tacones altos.

4. Cárdigans en colores vivos

Para ir rompedora, con estilo y cárdigan de colores tienes que saber elegir bien el color. Las pieles claras deben apostar por rosas, celestes y mentas y las pieles medias y oscuras estarán genial con colores cítricos y azules vivos.

Queda bien con: tank tops monocromáticos y las blusas camiseras informales metidas por dentro de los vaqueros o de una falda de cuero. Completa este look con unos tacones o sandalias.

Los hombres deben huir de los cárdigans demasiado largos o XXL y apostar por los modelos clásicos que llegan hasta el final de la espalda. Combínalo con unos vaqueros oscuros, zapatos de piel con cordones y una parte de arriba básica como una camiseta blanca, por ejemplo. También puedes abrocharte el cárdigan hasta arriba como si fuera un jersey.

Cuando un blazer clásico sea demasiado, acertarás de lleno con un cárdigan simple a la par que elegante.

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